El esquema de trabajo que te ahorrará estrés y mejorará tus resultados.
Esto le pasó al amigo de un amigo: Un par de días antes del día de las madres se dio cuenta de que debería de publicar algo al respecto en sus redes. Pidió a su diseñador hacer algo rápido. El diseñador hizo lo que pudo, la publicidad salió tarde, consiguió pocas vistas y no trajo beneficio alguno.
¿Te ha pasado? Seguro que no. Pero para que no te vaya a pasar te traigo un esquema de trabajo que utilizo con mis clientes, basado en lo que varias marcas grandes utilizan, pero adaptado a PyMEs y que genera mayor organización, reducción del estrés y mejores resultados.
Este esquema es muy sencillo de entender y de implementar. Simplemente se trata de generar los productos de promoción con 3 meses de anticipación.
- Dividimos el año en trimestres.
- Definimos el objetivo que queremos lograr al término del año.
- Ese objetivo lo dividimos en metas para cada trimestre.
- Llevamos a cabo la estrategia para alcanzar el objetivo… del siguiente trimestre.
¿En dónde está la magia y por qué es tan efectivo este esquema?
La mayoría de los creativos trabajan contra reloj. Es muy común que las empresas soliciten videos, diseños, anuncios de todo tipo a las agencias de marketing. Estos hacen su mejor trabajo, se desvelan, no comen y entregan con buena calidad y a tiempo (en la mayoría de los casos). Sin embargo, todos sabemos que las cosas echas a las carreras nunca quedan tan bien como hubieran podido quedar.
Además hay que considerar que esas horas de desvelo no son gratuitas y en la factura se cobra todo. Las grandes empresas se dan el lujo de trabajar así porque pueden pagarlo, pero para una PyME puede ser un gran error.
Fueron las mismas grandes empresas las que encontraron la solución. Marcas como Coca-Cola o Google trabajan por adelantado. ¿Has visto los famosos Doodles? Bueno, pues no se sientan un día antes a decir “¿Qué efemérides hay mañana?”. Todo un equipo de creativos define sobre qué tratará el Doodle que saldrá dentro de 3 meses (o más) y luego se le da tiempo a su realización.
No está de más mencionar los beneficios de este esquema:
- Mayor tiempo para planear y realizar los productos de promoción.
- Por ende, mayor calidad en cada uno de ellos.
- Los costos se reducen.
- Los productos están listos mucho antes y su publicación se programa, eliminando el riesgo de decir “¡feliz día del niño!” cuando ya es mayo.
- Si tu producto tiene texto cuentas con tiempo suficiente para que varias personas lo revisen y cuiden minuciosamente la ortografía y redacción.
- Las fechas con más festividades son de septiembre a enero. Estos meses suelen ser también los de trabajo más intenso en la mayoría de los giros. Trabajar con un trimestre de anticipación te dará una cosa menos en qué pensar cuando lleguen esas fechas apretadas.
- ¿Tu proveedor te quedó mal? ¿Algo se atrasó? No hay problema, hay tiempo para solucionarlo.
- Trabajando la producción 3 meses antes puedes dedicar más tiempo a medir tus resultados y afinar la campaña si es necesario.
Puede ser complicado acostumbrarse a trabajar con 3 meses de anticipación. Más en nuestro país, donde dejar todo para el final es casi una norma. Pero con un calendario firme y con compromiso, todo se puede.
Es importante que respetes tus fechas y no te confíes. De lo contrario te estresarás el doble, porque tendrás que cumplir lo que dejaste para después, más lo que corresponde a ese mes.
Haz la prueba y déjanos saber cómo te fue. Si necesitas asesoría para llevarlo a cabo, también podemos apoyarte.